Los primeros habitantes de la parroquia la unión llegaron en el año de 1786 en el mes de septiembre 18, arribaron desde Jipijapa entrando por la Cruz y la Mona hasta llegar a la comunidad El Ramito, pasar a Vargas Torres.
En esta área ya Vivian los señores de apellido Castillo y Pilay, los ciudadanos Nicolás Lino, Sebastián Gutiérrez, Cecilio Pihuave y Santiago Marcillo avanzaron hasta la cabecera parroquial para luego regresarse a Jipijapa, para convencer y traer más personal con el fin de aprovechar estas tierras fértiles del territorio de la parroquia La Unión.
Así que regresan en compañía de los señores Juan José Jiménez, Concepción Muñiz, Eloy Parrales, Agapito Chavarría, Daniel Quimiz, Ismael Quimiz, Gregorio Quimiz y Agustín Tumbaco, hombres que dejaron labrado y cultivado, que a la larga dio buenos resultados.
Teniendo la facilidad de transporte a la unión llega los señores Andrés Baque y don Prospero Pérez García los cuales pusieron interés en el recinto, especialmente en el campo educativo, ya que hasta en esos tiempos había existido profesores particulares tales como la señora Franco, la primera en llegar a educar a los hijos de la Unión, después don Medardo Pincay, don Targelio David y don José Velastegui, los mismos que daban clase en la casa de los señores Ismael Quimiz, Segundo Lino, Rufino Del Valle y Segundo Lazcano.
Cabe indicar que llegaron en años diferentes, por tal razón Andrés Baque llamo a las reuniones para tratar de asuntos de la creación de la escuela, llegando a concretarse en los años siguientes se fueron creando la primera, se construyó el cementerio y la iglesia, eso sucedió en la década de 1940 – 1950, de igual manera se comenzó a festejar las fiestas patronales organizándolas en el primer año con el préstamo de una imagen a don Hipólito Indacochea y así se comenzó con la construcción de la iglesia y el cambio respectivo de una imagen de la Virgen de las Mercedes conseguida con el aporte de todos los habitantes para estas gestiones se había creado el comité Pro Mejoras del Recinto, mismo que tenía vida jurídica además consiguieron la donación de un terreno para el Campo Santo.
Viendo lo difícil que era transportar la producción tanto a Jipijapa como a la parroquia llega del señor Israel Quintero Paredes a Vargas Torres, con la idea de abrir pica para hacer un camino a Paján el mismo que no tuvo la acogida por cuanto se viajaba más por Jipijapa , o hacia Sucre.